LA UTILIZACIÓN CORRECTA DE LA ESCRITURA COMO HERRAMIENTA  PARA EVITAR EL PLAGIO EN ESTUDIANTES

En la actualidad la producción de textos escritos es más sencilla pues para los estudiantes acceder a la información es más fácil gracias a la tecnología. El ser humano ha logrado desarrollar una amplia gama de herramientas útiles para la producción de textos escritos, como por ejemplo la internet, que  hoy en día es la…

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En la actualidad la producción de textos escritos es más sencilla pues para los estudiantes acceder a la información es más fácil gracias a la tecnología. El ser humano ha logrado desarrollar una amplia gama de herramientas útiles para la producción de textos escritos, como por ejemplo la internet, que  hoy en día es la herramienta más rápida para conseguir todo tipo de información, por lo que  puede ser considerada como una gran aliada cuando su utilización es correcta. Diversos centros de estudio la utilizan principalmente para la universalización de textos y documentos que se encuentren en un mismo soporte, son los llamados repositorios. Sin embargo este facilismo por la obtención de la información ocasiona situaciones contraproducentes en el desarrollo de textos escritos, debido a que los estudiantes terminan usando la información a manera de plagio, pues esta facilidad de obtención de información termina tentando al estudiante tomar información que no le pertenece y plasmarla en su texto escrito, restándole originalidad al texto; peor más allá de aquello, termina cometiendo un delito penado por los distintos gremios que  precautelan la propiedad intelectual.

Pues bien para empezar es importante mencionar que  el plagio en la  mayoría de países cuyas reformas educativas exigen la justificación de  información en los textos que se producen desde la academia y que en su mayoría son regidos por la Asociación Americana de Psicología, el plagio esta estimulado como delito que atenta los derechos de propiedad intelectual de quienes hayan creado un texto de su autoría y este registrado como tal. Por lo tanto y más allá de la índole legal el plagio es un mal que  resulta ser muy común entre los estudiantes, particularmente aquellos quienes no tienen ninguna  base acerca de las herramientas a las que se puede recurrir  para la justificación de  información no perteneciente al estudiante. Todos aquellos mecanismos recaban en un único pilar, la utilización correcta de la escritura. Cassany en su libro “La cocina de la escritura” menciona  un serie de consejos  muy útiles con los que  se puede  ayudar al estudiante  a entrenarse en el uso correcto de la  legua de forma escrita. Si  bien es cierto que las normas APA la forma en que se debe desarrollar un texto, y en lo que al plagio recomienda citar al autor que le pertenece dicha información, con el principal objetivo de  justificar la fuente de donde se obtuvo tal o cual información, sin embargo APA no nos enseña de qué manera debemos hacerlo más allá de la forma.

La cita a su vez está clasificada de diversas formas, en primer  lugar tenemos la clásica cita que de manera personal considero se debe usar con mucha mesura, es la cita textual o literal, la misma que sugiere tomar  la información textualmente  del autor y transcribirla directamente al texto que el estudiante este creando, parece fácil, sin embargo es importante tener en cuenta que el estudiante no puede modificar para nada  ningún rasgo ni siquiera  algún error si es que existiera ya que  eso se considera una manipulación de la información y por tanto el escrito pierde credibilidad. Cassany en su libro “cocina de la escritura” menciona algo importante con respecto a la  utilización de  signos  de puntuación, y lo que no le puede faltar nunca a  una cita textual son las comillas (“  ”) ya que son estos signos los que nos indicaran que  esta información esta presentada tal y cual el autor quizá expresarla. Y no hay que olvidar que terminado este proceso el estudiante habrá de citar el nombre del autor  y su información de acuerdo a las normas a las que se esté rigiendo.

Por otro lado la cita  de más  de  40 palabras, es  las más útil de todas las citas, y por lo general la más utilizada, esta a su vez requiere  de un dominio ideal de la lengua, pues está íntimamente  relacionada con lo que Daniel Cassany en su libro “enseñar lengua” capitulo 6 denominó enfoques comunicativos, que no son sino  la intención comunicativa del texto, esto es importante ya que la cita de más de 40 palabras requiere estrictamente  el parafraseo de la información que el estudiante requiere, y este el que debe tener conocimientos suficientes en la lengua para poder lograrlo. Es en este punto cunado el estudiante se ve tentado a copiar  información que no le pertenece, ya que no conoce bien todas las herramientas que le pueden permitir parafrasear con éxito una frase o pensamiento ajeno a él, por lo que el deberá dominar aspectos de la lengua tales como  la sinonimia  y antonimia, además de temas  más importantes como la arquitectura de la frase que es como Cassany denomino la forma de escribir frases de forma correcta basándose en diferentes manuales que de paso cito correctamente como son La Vanguardia, El País, etc., que  brindan la posibilidad al estudiante de darle el estilo formal ideal al texto, con el numero correcto de  palabras por línea que se sugiere deben formar y estructurar una frase que  seg el son de entre 20 a 30 palabras pro frase por citar un ejemplo.

Otra herramienta muy útil que servida por siempre al estudiante en la elaboración de textos, es la lectura, pues esta desarrolla en el estudiante un diverso cumulo de habilidades que le irán perfeccionando en el arte de parafrasear. Él parafraseo de información pretende  desarrollar en quien lo practique la retención de información obtenida de una fuente  y la posterior reproducción con el reconocimiento justo de la fuente anterior que transfirió el conocimiento. En ocasiones dentro de una cita que se está parafraseando  puede requerirse insertar una cita más pequeña, esto normalmente se conoce como cita de cita, que también requiere del análisis antes mencionado. Sin embargo deberá evitar a  toda costa el alargamiento de su frase debido a que puede producir un fenómeno conocido como verborrea en el ardor popular, debido a que  en acciones no solo el estudiante si no todo aquel  que desarrolle textos escritos, tiende  a proporcionar más información de la requiere, lo que en consecuencia puede producir una fatiga a quien escribe y una falta de interese de quien lee.

Finalmente  el estudiante deberá tener en cuenta varias recomendaciones que  le pueden ayudar  a  no plagiar información, con respecto a la utilización de palabras, e s muy necesario amplíe su léxico, y estar consciente que si es una información que  no tiene forma de ser para fraseada sea esta por ser un enunciado, postulado, o ley se debe hacer uso de una cita textual, el estudiante deberá evitar la repetición de palabras en su parafraseo y a su vez en todo el desarrollo el texto. De igual forma Cassany recomienda evitar las muletillas, comodines, exageraciones, solecismos, tecnicismos y arcaísmos entre tantos otros aspectos que pueden afectar el éxito del texto. Se recomienda leer constantemente y revisar rigurosamente una y otra vez el desarrollo de la frase parafraseada, muchas veces pensamos que ya hemos modificado la información y que es precedente a transcribirla pero sin darnos cuenta podemos estar tomando un pensamiento ajeno, en la red hay distintos programas o aplicaciones que permiten analizar la información que se utilizar lo que es recomendable hacer uso de estos programas para ir verificando el éxito de la producción de conocimientos propios  basados ya solo en un fundamento.

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2 respuestas a «LA UTILIZACIÓN CORRECTA DE LA ESCRITURA COMO HERRAMIENTA  PARA EVITAR EL PLAGIO EN ESTUDIANTES»

  1. Qué casualidad, leo un post tuyo por primera vez y citas a Daniel Cassany, que fue uno de mis profesores de Ciencias del Lenguaje en la facultad!

    1. Hola, y gracias por seguir mi blog. Sucede que Cassany es un referente para la escritura en temas de redacción básica principalmente para redacción de tipo académica. Tuve una maestra en los primeros años de universidad que a mi parecer (lo idolatraba) con sus libros nos ilustró. Hoy por hoy considero a sus libros bastante buenos. Saludos Ana. seguimos Adelante.

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